EL SALAT ACTOS NO OBLIGATORIOS |
El
Salat también tiene actos
que son Sunna, considerándose aconsejables el poder realizarlos para así obtener el mayor beneficio del Salat.
Levantar
las manos
Esto
se debe realizar al comienzo de cada Takbir
de cada Salat. Dice Ibn
al-Mundhir:
“Todos los sabios están de acuerdo en que Rasul Allâh (s.a.s.) levantaba
sus manos al comienzo de su Salat”.
Como levantar las manos
Muchas
narraciones han sido registradas al respecto. Muchos eruditos han seguido la
siguiente tradición: Las manos son alzadas a la altura de los hombros con
la punta de los dedos paralelas al lóbulo de las orejas. Es preferible
extender los dedos mientras se alzan las manos.
Cuando
levantar las manos
Se
deben alzar las manos al mismo tiempo que se pronuncia el Takbir. Nafa’ narró que cuando Ibn ‘Umar comenzaba su Salat
pronunciaba el Takbir y levantaba
sus manos. El Mensajero de Allâh (s.a.s.)
también lo realizaba de esta manera (transmitido por Al-Bujari, an-Nasa’i
y Abu Dawud).
En
cuanto a levantar las manos antes del Takbir,
Ibn ‘Umar refirió: “Cuando el
Rasul (s.a.s.) se levantaba para realizar su Salat, alzaba sus manos
hasta que estaban paralelas a sus hombros y pronunciaba el Takbir
(transmitido por Al-Bujari y Muslim). Un
Hadiz de Malik ibn al-Huwairith dice lo siguiente: “Pronuncia
el Takbir y luego eleva tus manos” (transmitido por Muslim). Según
esto, el Takbir se realizaría
antes de alzar las manos, pero Ibn Hajr dice: “No
he encontrado a nadie que sostenga que el Takbir se realice antes que el
hecho de alzar las manos”.
Es
aconsejable alzar las manos mientras uno se inclina para hacer el Ruku’at
y mientras se vuelve a la posición erguida después de realizado el
mismo. Veintidós
compañeros transmitieron que Muhammad (s.a.s.) lo realizaba de esta
forma. Narró Ibn ‘Umar: “Cuando el Rasul (s.a.s.) estaba de pie para realizar el Salat,
levantaba sus manos hasta la altura de sus hombros y luego pronunciaba el
Takbir. Cuando se disponía a realizar el Ruku’at, volvía a levantar las
manos de la misma manera. Cuando levantaba la cabeza de la posición de Ruku’at
hacía lo mismo diciendo: “Samiu’
Allâhu Liman Hamidah” (transmitido por Al-Bujari, Muslim y al-Baihaqi).
Dice Al-Bujari: “Esto no lo
realizaba (el levantar las manos) cuando se disponía a hacer el Suÿud ni
cuando se levantaba del mismo”. También dice Al-Bujari: “
El no levantaba las manos entre los dos Suÿud”. Sin embargo, los
Hanafíes sostienen que sólo se debería levantar las manos al comienzo.
Esto se basa en un Hadiz de Ibn
Mas’ud, quien narró: “Yo realicé
el Salat con el Rasul (s.a.s.) y levantó sus manos una sola vez”.
Sin embargo esta es una opinión débil y muchos eruditos del Hadiz
han criticado esta narración. La gente de Kufah
transmitieron que el Mensajero de Allâh
(s.a.s.) no alzaba sus manos al realizar el Ruku’at,
ni al levantarse del mismo. Sin embargo, esta aseveración hay que
considerarla de poco valor debido a los errores que contiene. En cualquier
caso y aún aceptándola tal como lo hace at-Tirmidzi, no invalidaría la
autenticidad y veracidad de los Hadices
anteriores. Esta Sunna concierne
tanto a hombres como a mujeres y no hay discrepancia en cuanto a ello.
Colocar la mano derecha sobre la izquierda
Hay
veinte Hadices de dieciocho compañeros
y sus seguidores sobre este punto. Dijo Sahl ibn Sa’d: “Se
le indicó a la gente que colocara su mano derecha sobre su antebrazo
izquierdo durante los Salat”. Comentando esto dice Abu Hazm: “No
se si él atribuyó esto al Rasul (s.a.s.)” (Hadiz
es transmitido por Al-Bujari, Ahmad y Malik en su al-Muwatta). Hay también un Hadiz
de Jabir que dice: “El Rasul (s.a.s.)
pasó junto a un hombre que realizaba su Salat con su mano izquierda
sobre su derecha, entonces él (s.a.s.) se la retiró y le colocó la mano
derecha sobre la izquierda” (relatado por Ahmad y otros).
La
posición de las manos
Al-Kamal
ibn al-Haman es de la opinión de que: “No
hay auténtico Hadiz que afirme que uno deba colocar las manos debajo del
pecho o debajo del ombligo.
Según los Hanafíes,
las manos se deben colocar debajo del ombligo y los Shaf’ies dicen que debajo del pecho. Ahmad tiene dos narraciones
correspondientes a ambas opiniones. La correcta opinión sería colocarlas
en un lugar intermedio”.
Transmitió Wa’il ibn Hajr: “Una
vez que hice el Salat con el Rasul (s.a.s.) observé que este
colocaba su mano derecha sobre la izquierda a la altura de su pecho”.
Este hecho es recogido por Ibn Juzaimah, que lo considera Sahih.
El Du’a de apertura
Es
preferible antes de realizar el Salat
recitar uno de los Du’a con los
que el Mensajero de Allâh (s.a.s.)
solía comenzar su Salat.
Esto se realiza después del Takbir de
apertura y antes de la recitación de al-Fatihat.
Algunos de los Du’a que han sido
transmitido son los siguientes: "Allâhumma Ba'ad Baîni wa
Baîna Jataiai Kama Ba'dta Baîna Mashriq wa al-Magrib"
(Allâhumma establece
una distancia entre mí y mis errores tan grande como la que has hecho entre
el Este y el Oeste). "Allâhumma
Naqqani min Jataiai Kama Iunaqqi
Azaub al-Abiad min Danas" (Allâhumma
límpiame de mis errores de la misma forma en que un traje blanco es
limpiado de la suciedad), (transmitido por al-Bujari, Muslim, Abu Dawud, an-Nasa'i
e Ibn Majah). Otro Du'a puede ser
el siguiente: "Subhânaka
Allâhumma wa Bihámdika wa Tabáraka Smuka wa Ta'la Yadduka wa lâ Ilaha Gháyruk.
A'udzu Billâhi min ash-Shaytáni
r-Raÿim" (exaltado sea Allâh,
para Él sea la alabanza, la Baraka
de su Nombre, no hay más Verdad que la Suya. En Allâh me refugio de Shaitan
el lapidado).
Es
Sunna decir en silencio: “A'udzu
Billâhi min ash-Shaytani r-Raÿim” (en Allàh busco refugio de Shaitan
el lapidado). Esto es aconsejable
hacerlo entre el Du’a de
apertura y la recitación deQur’ân.
Los Shaf’íes son de la opinión
de que se puede decir en silencio o en voz alta en aquellos Salat que se realicen en voz alta.
El
decir A'udzu Billâhi min ash-Shaytani
r-Raÿim sólo se realiza en la primera Rak’at.
Amîîn
Se
considera Sunna pronunciar Amîîn,
después de la recitación de al-Fatihat.
La palabra Amîîn no forma parte
de la Sura al-Fatihat,
sino más bien un Du’a significando:
“Oh Allâh responde a nuestra
recitación". Debe pronunciarse en voz alta en aquellos Salat
en los que la recitación también se realiza en voz alta y en silencio en
aquellos cuya recitación sea también en silencio. No obstante no hay
uniformidad de criterio respecto a esto, ya que “Más
de un Sahaba ha dicho que ha de
levantarse la voz mientras se dice Amîîn y no hacerlo en silencio”.
Ibn Hajr sostiene que la cadena de este Hadiz
es Sahih, sin embargo al-Albani no
está de acuerdo con ello.
Es
preferible decir Amîîn junto con
el Imâm y no antes o después de
él.