LAS RELACIONES SOCIALES EN EL ISLAM

(I PARTE)

 

        

        Las relaciones entre los miembros de una sociedad islámica están basadas en dos principios fundamentales: en primer lugar la conciencia de los fuertes lazos de hermandad que unen a un individuo con otro, y en segundo lugar, la protección de los derechos del individuo y la sacralidad de su vida, honor y propiedad tal como es establecido por la Shari’a islámica.

 

         Las palabras, hechos y conductas que contravengan o amenacen estos dos principios están prohibidos en el Islam, siendo el grado de prohibición dependiente de la magnitud del material o del daño moral que pudiera resultar de los mismos. En la siguiente aya encontramos algunos ejemplos de estos actos prohibidos que son dañinos para la hermandad y la sacralidad de los seres humanos. Allah (s.t.) dice: “En verdad, todos los musulmanes son hermanos. Estableced, pues, la paz entre hermanos, y temed a Allah para que se os muestre misericordia. ¡Oh vosotros, los creyentes! No permitáis que un pueblo se burle de otro, que puede ser mejor que ellos, ni que las mujeres se burlen de otras mujeres, que pueden ser mejores que ellas. No calumniéis a vuestra propia gente, ni os llaméis mutuamente por nombres deformados. Malo es, en verdad, ganar un mal nombre después de haber creído; pero quienes no se arrepienten son perversos. ¡Oh vosotros, los creyentes! Evitad al máximo las sospechas; y prevenios, pues algunas sospechas están al borde de la trasgresión. No espiéis ni murmuréis de los demás. ¿Le gustaría a alguno de vosotros comer la carne de su hermano difunto? Cierto que os repugnaría. Temed a Allah, pues Allah es Misericordioso.” (Corán 49:10-12)

 

         Aquí Allah proclama que los musulmanes son de hecho hermanos unos de otros unidos a través de la hermandad del Islam en añadidura a la hermandad como seres humanos. Esta relación de hermandad requiere el conocimiento mutuo y no esquivarse mutuamente, establecer lazos y no romperlos, amarse y no odiarse mutuamente, ser sinceros y no frívolos, unirse unos con otros y no separarse. El Profeta (s.a.s.) dice, “No sed envidiosos unos con otros, no murmurar ni odiaros unos a otros, sino sed hermanos en el servicio de Allah”, (Transmitido por al-Bujari y otros)

 

 

         La ilicitud de romper los lazos con un hermano musulmán

 

         Es haram para el musulmán rehuir a un hermano musulmán, romper los lazos con él, o apartarse de él. Si dos musulmanes disputan entre sí, les está permitido dejar pasar un periodo de tres días para enfriar la situación, después del cual deben buscar los medios para conseguir la reconciliación y la paz, vencer su orgullo, su cólera y odio. Una de las características de los musulmanes ensalzadas en el Corán es que son “humildes hacia el resto de los musulmanes.” (Corán 5:57 (54) ). El Profeta (s.a.s.) dijo, “No le está permitido al musulmán mantenerse alejado de su hermano más de tres días. Si han pasado más de tres días, debe encontrarle y saludarle, y si le devuelve el saludo, ambos tendrán parte en la recompensa, pero si no le devuelve el saludo sobre éste pesará la falta, mientras que aquel que le ofreció sus saludos habrá sido liberado de la falta.” (Transmitido por Abu Dawud)

 

         La prohibición de romper los lazos es aún más enfatizada en el caso de las relaciones consanguíneas. El Islam ha hecho obligatorio a los musulmanes fortalecer los lazos de parentesco. Dice Allah (s.t.) “¡Oh, hombres! Temed a vuestro Señor quien os creó de un solo ser del cual creó a su pareja y de los dos hizo descender a muchos hombres y  mujeres; y temed a Allah, en cuyo nombre recurrís unos a otros, y temedLe particularmente respetando los lazos del parentesco. En verdad, Allah os observa.” (Corán 4:1)

 

         Usando un lenguaje gráfico, el Profeta (s.a.s.) enfatizó el valor del parentesco a la vista de Allah diciendo, “El útero está atado al Trono de Allah y dice, ‘Aquel que se mantiene unido conmigo, Allah lo mantendrá unido, pero aquel que corta conmigo, Allah cortará su unión’”. (Transmitido por al-Bujari y Muslim). También dijo, “Aquel que corta no entrará en el Paraíso.” (Transmitido por al-Bujari). Explicando el significado de este hadiz, algunos pensadores dicen que el significado está referido a “aquel que corta los lazos del parentesco”, mientras que otros dicen que su significado se refiere a “aquel que corta el camino”, es decir, el salteador de caminos.

 

         Fortalecer las relaciones de parentesco no solo significa devolver una visita o un bien con otro bien, pues esto es lo natural y lo esperable, sino que lo que significa es mantener una relación amistosa incluso con aquellos parientes que nos rehuyen. El Profeta (s.a.s.) dijo, “Aquel que fortalece las relaciones de parentesco no es aquel que meramente corresponde al otro, sino que son aquellos que fortalecen tales lazos a pesar de ser rechazados por los demás.” (Transmitido por al-Bujari). Todo lo anterior se aplica en tanto en cuanto el rechazo no se haga por amor a Allah, porque si se hiciera por el amor de Allah y por una cuestión de justicia, estas prescripciones no se aplican. El lazo más fuerte entre los musulmanes se establece a través del amor hacia Allah. Durante cincuenta días el Profeta (s.a.s.) y sus Compañeros rehusaron a tres hombres que se quedaron en casa y no fueron a la Batalla de Tabuk. Este boicot fue tan generalizado que los tres hombres no sabían que hacer ni a dónde ir, sentían que la tierra, a pesar de su vastedad se había convertido en una prisión para ellos. Nadie les visitaba, nadie les dirigía la palabra y nadie les saludaba. Este boicot continuó hasta que Allah aceptó su arrepentimiento y reveló al Profeta (s.a.s.) que les había perdonado. (Transmitido por al-Bujari y Muslim)

         En otra ocasión, el Profeta (s.a.s.) permaneció alejado de algunas de sus esposas durante cuarenta días.

 

         ‘Abdullah bin ‘Umar rechazó a uno de sus hijos por el resto de su vida porque su hijo no acató el hadiz, que le había narrado su padre, en el que el Profeta (s.a.s.) prohibió a los hombres que impidieran a sus mujeres ir a la mezquita. (Transmitido por Ahmad. As-Suyuti escribió un artículo titulado, ‘El castigo por el boicot’, justificándolo en diversos hadices y actuaciones de los Compañeros del Profeta)

 

         La enemistad y el repudio entre musulmanes nunca debe hacerse por motivos mundanales, porque a la luz de Allah y de los musulmanes, el mundo entero es de tan escaso valor que no merece la pena abandonar y romper la relación con un hermano musulmán. ¿Cómo podría ser de otra manera, cuando la pena por tal rencor es la privación de la Misericordia de Allah (s.t.)?

 

         El Profeta (s.a.s.) dijo, “Las puertas del Jardín son abiertas los lunes y jueves, y Allah perdona a todo aquel que no asocia nada con Allah excepto al hombre que pone enemistad entre él y su hermano. Por tres veces será dada la orden: ‘Dejadlos hasta que se reconcilien’”. (Transmitido por Muslim)

 

         Para la persona que ha resultado ofendida bebe bastarle con que su hermano venga y se disculpe ante él, entonces aquel debe aceptar la disculpa y reconciliarse. Es haram rechazar y no aceptar las disculpas de su hermano. El Profeta (s.a.s.) advirtió contra esto diciendo que aquel que actúe de esta manera no lo encontrará, al Profeta, en la Fuente del Paraíso en el Día de la Resurrección. Transmitido por at-Tabarani).

 

         Musulmanes Andaluces