EL
OLIMPISMO ALMERIENSE DEL S. XVI
Haris al Kanz Ubaidallah
Corría el año del Señor de 1.568, Don Fernando de Válor, Caballero
Veinticuatro de Granada, se manifestaba disconforme con el incumplimiento, por
parte de las autoridades cristianas de los tratados que dieron lugar a la
entrega del Reino y que están plasmados en las Capitulaciones de Santa Fe. El
24 de Diciembre de este año se subleva contra la ocupación cristiana, y el
grave incumplimiento de los pactos por parte de los Reyes de Castilla y Aragón,
Isabel y Fernando, y sus sucesores, ese día se proclama Emir del Reino de
Granada en Béznar, tomando el nombre de Mulay Muhammad Aben Humeya.
Casi un año después, a finales del 977 H. Aben Humeya lleno de optimismo y
para estimular a la sociedad morisca levantada contra la ocupación cristiana y
elevar el bienestar de sus gentes inaugura en Purchena (Almería) una nueva era
olímpica convocando unos juegos, “Fiel a las tradiciones de mi linaje y
queriendo restituir absolutamente las costumbres de nuestros mayores, para
celebrar este gran momento del Valle del Almanzora, Valle de la Victoria, vengo
a convocar aquí, en Purchena, unos juegos al estilo de los de la antigua Olímpica...”
dijo en su discurso inaugural, según nos atestigua Ginés Pérez de Hita en sus
“Guerras Civiles de Granada”. Estos Juegos fueron reconocidos como históricamente
comprobados y pasaron a formar parte de la historia olímpica en el año 1.997
desde el cual la bandera olímpica forma parte de los Juegos.
Los Juegos con sus once pruebas deportivas y dos musicales tienen algunas
diferencias con los actuales Juegos Olímpicos, pero no tantas con los
originales.
Efectivamente en los últimos juegos de Sidney en el 2000 hubo un total de
treinta y tres deportes en competición, pero en la antigua Olimpia solo hubo
ocho competiciones que pudiéramos llamar deportivas mas la música, que si
estaba presente en los griegos al igual que Purchena.
Las pruebas musicales son dos especialidades diferentes, la primera
probablemente muy parecida a la primitiva es de canto, debiendo recitarse la
canción en público, la segunda muy propia de la cultura musulmana es de danza,
también ejecutada en público.
En cuanto a las deportivas, resulta curioso que la competición de carros propia
de los griegos se sustituye por la mas banal y próxima a la sensibilidad
andalusí de carrera de cintas a caballo. En las carreras hay dos una de medio
fondo, media legua, y otra de velocidad, 60 metros, en todo parecidas a las clásicas.
En el terreno de las luchas, en Purchena solo tenemos una, la lucha libre olímpica,
mientras que los griegos además de esta tenían el boxeo, mucho mas cruel que
el actual, y el Pankration que era una lucha a muerte, al estilo de los
posteriores gladiadores romanos.
En saltos al igual que en la antigüedad tenemos el triple salto, que parece
gustar mas al público que el normal salto de longitud.
En lanzamiento sorprende que no se compitiera en lanza, o jabalina, que si
estaba en los clásicos pero que además era un arma muy usada, y con mucha
destreza por los guerreros de todas las épocas. Pero sin embargo si se compite
en Purchena en lanzamiento con honda que pasa por ser el arma mas antigua que
equipó a un ejercito regular. No hay lanzamiento de disco, pero sí de peso,
una piedra de 6 kg., así como también hay pruebas de puntería en lanzamiento
de cantos, muy propios de la zona por otra parte.
Resulta curioso que en las primeras pruebas de Olimpia no hubiese pruebas de
levantamiento y sostenimiento de elementos constructivos, se ve que los
participantes eran principalmente destructivos, aquí en Purchena si hay, sin
embargo, constructores y por ello se compite en levantar una gran piedra de 6
arrobas (unos 68 kg.), muy parecida a un trozo de fuste de columna, y también
en sostener en la mano un numero cada vez creciente de ladrillos.
También podemos encontrar en ellos semejanzas con los Juegos Mediterráneos,
pues aunque en menor escala, participan andalusíes y turcos, actualmente solo
como representación, y algún que otro magrebí. Y en estos 24 disciplinas
frente a las trece de los Juegos de Purchena, con la peculiaridad de que dos son
musicales, de las cuales no hay ninguna en los Juegos Mediterráneos.
¿Seria posible que una de las peculiaridades de Almería fuese que hubiese
también competición musical?, aunque fuese algo paralelo, algo de Alamar, ese
encuentro de música mediterránea que nos deleita todos los años con esa
inmensa variedad de ritmos.
Afortunadamente
el escudo de Almería no tiene alas, con lo cual se evita que el gobierno de
Madrid pueda cortarles las alas a Almería, como ya hizo D. Felipe el segundo
con Purchena.